proteger las plantas del frío

Ya faltan pocos días para el invierno y con la llegada del frío es importante saber cómo proteger nuestras plantas para evitar daños provocados por bajas temperaturas, lluvias excesivas o heladas. Sin duda, no debemos subestimar esta situación, y con la ayuda de unos cuantos consejos podremos solucionar y prevenir los posibles problemas.

Lo primero que hay que tener claro es que debemos interpretar la situación correctamente bajo dos puntos de vista. En efecto, los dos factores más importantes a tener en cuenta son: la tipología de planta que queremos cuidar y la posición geográfica donde se encuentra la planta.

Cada especie tiene una resistencia al frío y a los agentes atmosféricos determinada, y según sus proveniencias tendremos que actuar de una manera u otra. Por ejemplo, si se trata de plantas crasas tendremos que prestar más atención, ya que son más delicadas que las demás; sobre todo si vivimos en zonas donde las bajas temperaturas son permanentes durante el invierno. Lo mismo sucede con los árboles frutales, estén plantados en jardinera o directamente en la tierra.

 

Plantas que encaran el invierno al aire libre

Las plantas invernales que tienen en su adn una alta resistencia a bajas temperaturas y al hielo, podrán vivir tranquilamente fuera de casa. Obviamente tendremos que utilizar algunos trucos para que sufran lo menos posible. Una solución muy eficaz es acercar las plantas a las paredes de la casa; para que a lo largo del día se beneficien del calor que desprende la vivienda.

En este caso, también resulta importante que la orientación sea hacia el norte, así estarán automáticamente más protegidas de los rayos del sol. Quizás podría parecer un contrasentido, sin embargo, en realidad este calor iría derritiendo la escarcha nocturna demasiado de prisa, con el consecuente riesgo de rasgar las paredes celulares de las plantas.

Si por otro lado hablamos de las especies de hoja perenne, el sol de invierno actúa como deshidratante, de tal manera que la necesidad de agua aumenta considerablemente. Sin embargo, hay que tener una particular cautela con las macetas, estando siempre atentos a que la tierra no se congele. En este caso, las raíces no podrían realizar su función vital, siendo privadas de la posibilidad de absorber el agua y permitiendo que la planta muera literalmente de sed.

 

Acolchado

Una técnica muy interesante que podemos utilizar es el acolchado, capaz de proporcionar innumerables beneficios. Este peculiar sistema consiste en cubrir la base de la planta creando una especie de mantillo con diferentes tipos de materiales naturales como hojas secas, astillas de madera o hierba.

Plantas y jardín

Fuente foto: wilkes.ces.ncsu.edu

 

Gracias a este procedimiento no solo podremos proteger nuestras plantas o arboles del frío, si no que lograremos aumentar el porcentaje de limitación de las malas hierbas, dejando el suelo prácticamente siempre bastante seco y, por lo tanto, compacto.

 

Valeriana

Quizás se trate de un método no muy conocido, pero el uso de la valeriana en estos casos resultará muy útil. En efecto, esta sustancia actuará como gran protector del frío para nuestras plantas, y a parte será un verdadero elixir de vida mejorando considerablemente la productividad de las plantas frutales. Tras preparar nuestro antídoto, dejando en infusión durante 4/5 días la valeriana para luego filtrarla, y usando un vaporizador, iremos distribuyendo nuestra solución directamente sobre las plantas en las primeras horas de la noche. Este tratamiento bien empleado nos regalará unos resultados sorprendentes.

 

Plantas que necesitan ayuda para afrontar el invierno

En invierno hay muchas clases de plantas que no se adaptan fácilmente, y como consecuencia, necesitan de nuestra ayuda. En este sentido, y para no crear problemas a lo largo de la estación más fría del año, deberán persistir las condiciones correctas de luz y temperaturas.

Por ejemplo, las plantas de hoja perenne pueden desarrollar un normal ciclo de vida solo en un ambiente suficientemente luminoso. Los invernaderos resultarán unas de las opciones mejores para estas clases de plantas, con un sistema a termostatos que manteniendo un el ambiente cálido.

proteger plantas del frío

Fuente foto: whatshed.co.uk

 

Pero cabe recordar que no se trata de una solución óptima para toda clase de plantas, ya que algunas especies se encuentran a gusto con temperaturas que varían entre los 5 y 10 grados. Así que en este caso  lo mejor será utilizar unas tiendas para plantas conectadas directamente a la casa, con un termostato anticongelante.

Como alternativa también podemos utilizar laminas o túneles de plástico,  aunque requieren de atención por la posible formación de humedad. Por ello, hay que abrirlos periódicamente para mantenerlos aireados y poder  garantizar el correcto mantenimiento de nuestras plantas. Además, el terreno deberá permanecer bastante seco, tratando de limitar las fases de riego para evitar agua estancada, uno de los grandes riesgos para la salud de las plantas. Sin duda, para poder estar seguros de cumplir con el protocolo y realizar  un buen trabajo , será necesario posponer cualquier poda hasta final de la temporada, ya que las ramas y las hojas todavía proporcionan una protección contra el frío.

En conclusión podemos decir que durante el invierno tendremos que trabajar bastante para entender exactamente qué necesitan nuestras plantas, y luego, elegir la opción más correcta. Cada situación es diferente, por lo cual se requiere un preciso estudio antes de proceder para encontrar lo que más se ajuste a nuestro caso y jardín.